Cuando hablamos de género y lenguaje, el uso del femenino en determinadas profesiones siempre es una cuestión controvertida. Hoy nos centramos en profesiones que tienen varias formas en femenino y recordamos algunos casos en los que una única forma vale para ambos géneros.
Formas que valen para masculino y femenino
Algunos nombres que acaban en -o: el/la piloto, el/la testigo, el/la miembro.
- Normalmente, los nombres que acaban en -o tienen la forma femenina acabada en -a: ministro/ministra; médico/médica. Pero hay algunos nombres que pueden hacer el femenino de dos formas: el diablo/la diabla – la diablesa.
La mayoría de nombres que acaban en -a: el/la atleta, el/la pediatra.
- En el caso de «poeta» hay dos opciones para hacer el femenino: el poeta/la poeta – la poetisa.
Algunos nombres que acaban en -ista: el/la taxista, el/la electricista.
En el caso de «modista», ha surgido el masculino regresivo «modisto».
Ligia Pérez de Pineda